Recogida de aguas pluviales y evaporación de embalses, estanques, lagos, piscinas...
Para estimar la cantidad de agua de lluvia que podemos captar se requieren los valores climatológicos normales, en concreto, la precipitación anual media que se mide en milímetros (que es lo mismo que litros por un metro cuadrado).
Si no se dispone de un valor local exacto, se puede obtener una aproximación en la Agencia Estatal de Meteorología. Una vez escogida la localidad, la precipitación aparece en la columna marcada con la letra R.
Si ya estás ahí, de paso puedes apuntar el valor de la temperatura media anual (letra T) que servirá para estimar la evaporación.
A parte, en la calculadora hay que introducir la superficie de captación (tejado, aparcamiento, piscina, pista de deportes...), la altura sobre el nivel del mar y el área del embalse de almacenamiento (para los abiertos al aire libre).
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